Estamos celebrando los REYES MAGOS, fiesta
que llena de ilusión y magia a los más pequeños y también a los “magos” de la
familia. Con esta fiesta vamos cerrando las celebraciones navideñas.
Litúrgicamente,
en la celebración de la Iglesia Católica, el 6 de Enero es la EPIFANIA,
es decir, celebramos que
Jesús nos trae la salvación de Dios a todas las personas sin discriminación alguna. Blancos y negros, feos y guapos, mujeres y
hombres, mayores y pequeños,…. Todos, absolutamente
a todos, se nos ofrece la salvación y el amor de Dios por medio de Jesús, el
Cristo.
Esta
fiesta nos debe recordar, y debemos celebrar, que todos los seres humanos somos hermanos, somos iguales en derechos y deberos, debiendo
compartir fraternalmente nuestro planeta tierra. Para Dios no hay razas, ni
discriminación.
Al igual que los magos, aprendamos a vivir unidos,
ofreciendo cada uno lo mejor de sí mismo a los demás y a Dios. Llenemos el mundo de magia, de ilusión, de
esperanza,…
especialmente la vida de los más pequeños, para ir construyendo una sociedad
más justa, más fraterna, más solidaria, especialmente en este tiempo de crisis y pandemia que estamos viviendo. Seamos
“magos” y que nuestra magia llene el mundo de Alegría y Fraternidad, haciéndolo
más humano y más divino.